Yo estoy sintiendo que no siempre puedo ser lo suficientemente buena en todo que quisiera. Han habido épocas en las que sí me lo he sentido, por ejemplo en Bachillerato con unas notas altísimas, el año pasado trabajando (aunque no del todo por otras cosas personales). Mi objetivo es tener éxito en la vida haciendo las cosas bien y no teniendo ningún impedimento para ello. Siempre lucho para ello. Por acabar con otras cosas que me duelen me cuesta más, pero con el tema trabajo y estudiar, pues lo que toca al fin y al cabo, tengo mucho sentido de la responsabilidad, autoexigente y siempre lucho. Lo que toca. Aunque lo que a veces me hace pensar que no soy lo suficientemente buena en ello y me hace perder bastante potencial es mi excesivo estado de estrés y ansiedad.
También se dice mucho "nadie es perfecto" pero paradójicamente se juzga a una persona por el más mínimo error. Quisiera sobre todo ser siempre buena en todo porque estoy muy cansada de que siempre haya la típica gente que me juzgue, y aún peor sin conocerme ni tener ni idea de nada. De no dar siempre buena impresión sobre mi. Muy cansada. Pero a la vez pienso que en cierta manera es normal y por lo tanto, también estoy harta de no siempre ser lo suficientemente buena para todos. Siempre me han afectado mucho esas cosas, el qué dirán. Dicen que el que dirán no importa, pero sí que importa realmente. Yo creo que bastantas veces puede decir mucho de una persona, aunque a la vez sé que no siempre y que se juzga demasiado. La impresión que uno da y cuantos y/o que errores que uno comete bastantas veces (aunque no siempre) dice mucho de una persona. Por eso, ojalá jamás haber cometido errores. Ojalá siempre saber como actuar bien. Ojalá ser perfecto en esta vida. No creo que cueste nada realmente. Solo consiste en eso: hacer las cosas bien, hacer el bien siempre.

Te aferras a un mundo onírico que recibe una fuerte bofetada de la realidad. Mientras hagas todo lo posible por agradar, caer bien, dar buena impresión, que todo te salga a la primera y nunca equivocarte. Desde allí te estás creando la fórmula para que todo se dirija al desastre.
Aprendemos de nuestros errores, mejoramos con el aprendizaje en que cambiamos cada día para que se entienda que equivocarse no es malo. Desde pequeños se nos educa que los fallos son intolerantes, se nos castiga por ello y eso provoca repercuciones de que debemos alcanzar la perfección para así poder ser aceptados. Eso es una idea dañina que solamente produce drustración cuando las cosas no salen como las esperamos.
Debes entender que gracias a esos fallos soportamos las adversidades que nos da la vida. Tan sencillo como el aprender a caminar, donde tuvimos que caernos varias veces para dejar de gatear.
Todos queremos sentirnos bien, en paz, en armonía. Todos queremos vivir en abundancia. Pero con frecuencia nuestra búsqueda de “lo bueno” se parece más a un intento de escapar de “lo malo” (
el dolor, el temor, la escasez, las preocupaciones de cada día). Vale la pena detenerse aquí a pensarlo por un momento…ser tú es para sentirte bien contigo misma, no para que otros deseen estar bien contigo.
Solamente las personas inseguras les importa mucho como lo ven la gente que lo rodea.
Debes confiar en ti para no depender de como te ve la sociedad. Porque si les das gusto nunca vas a ser feliz. Ya que prácticamente te dejas manipular para ser aceptada. Por eso, te doy el consejo de: -
“Conócete a ti misma” -. Es el autoconocimiento lo que permite integrar y armonizar. Estas fuerzas vitales que constituyen, lo que posibilita reconocer y descartar aquellas otras que son ajenas. Que la familia y la sociedad inculcaron, que muchas veces se oponen a nuestro desarrollo y bienestar.
Pues es un hecho de la vida que no todo nos sale a la primera como lo fue el caminar o andar en bicicleta. Tuvimos que caer para poder levantarnos y seguir intentando. Y mi ejemplo favorito de Matrix; en que Neo a pesar de que es el Elegido no pudo lograr el primer salto.